Capítulo V

Operación Avalanche 1943

Se pretendía con ello dominar el Mediterráneo y eliminar a Italia de la contienda. La huella de este episodio, que ha dejado abundante bibliografía sobre sus antecedentes y consecuencias, quedó en una Pompeya destrozada por las bombas que tardó mucho en recuperarse. Las fotografías y documentos de archivo recogidos por Laurentino García y García en su libro Danni di Guerra a Pompei  fueron el primer estudio detallado que se hizo de un episodio que en la bibliografía sobre Pompeya se trataba de olvidar. Todavía hoy existen dudas de que pueda quedar alguna bomba sin explotar dentro del recinto que visitan millones de turistas. Una propuesta reciente de Vance Tiede está encaminada precisamente a estudiar la secuencia completa de bombas arrojadas en Pompeya y alrededores, con el fin de determinar si hay alguna que pueda calificarse como UXB (unexploded bombe).

Quedan sin embargo, vestigios visibles de este bombardeo en muchos lugares de la ciudad, e incluso restos de alguna bomba de gran calibre. Una de ellas se encuentra en la Casa del Fauno en una habitación del lado oriental cerca de la entrada

El periódico The Times recoge pocos días después la noticia de los daños en una nota en la que un oficial, que probablemente conoce bien Pompeya, describe los daños causados en cada una de las casas y edificios. Se excusa diciendo que "los alemanes estaban acampados en aquél lugar y obligaron a la aviación aliada a considerarlo un objetivo militar". Describe un cráter en la arena del anfiteatro, el muro en la palestra de los gladiadores golpeado en tres puntos diferentes, la casa de Trebio Valente, la de Epidio Rufo, el templo de Apolo, la casa de Triptólemo, la de Salustio, la de Pansa y otros puntos de la ciudad. Agradece de manera calurosa la contribución del director de las excavaciones, profesor Amedeo Maiuri en la enumeración e identificación de estos daños.

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Referencias bibliográficas